“Perder la capacidad de amar es lo más triste que nos puede pasar”, sentencia la escritora mexicana Mónica Lavín, quien interesada en escribir sobre el primer amor y la forma como trastoca la normalidad del individuo, desarrolla en “El Doble Filo” las historias de amor de dos mujeres que se proyectan y reflejan a través de una terapia donde el olvido de una se convertirá en el recuerdo de la otra.
La multigalardonada escritora que participará en la próxima Feria Universitaria del Libro, FUL 2014, que organizan la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH) y su Patronato, revela que tenía muchas ganas de escribir acerca del primer amor, como ese sentimiento capaz de darle dimensión a la palabra amar, con todas sus aristas, luminosas y terribles. “La vida es gozo y dolor y es una manera de entender estas dos aristas, por eso ‘Doble Filo’, porque el amor tiene gozo y una cara triste. Lo importante es saber que uno tiene la capacidad de amar”, expresa.
En esta, la primera novela corta de Mónica Lavín editada por Lumen y en la que se incluyen ilustraciones hechas por su hermana María José Lavín, el punto medular de la historia es el olvido y la necesidad de recurrir al olvido para borrar todo aquello que provoca dolor. En este caso, la historia de una chica muy joven que acude con una terapeuta en un intento por superar la crisis de su primer amor y en ese trayecto y sin saberlo, removerá en el interior de la terapeuta las múltiples emociones asociadas a sus propias relaciones amorosas.
“El primer amor de Antonia y la primer ruptura de Antonia es lo que está en cuestión en esta novela, pero también las historias de amor de la ‘Bruja’, que saldrán a luz porque el olvido de una es el recuerdo de la otra”, adelanta Mónica y confiesa que en esta narración va parte de su primera historia de amor y una invitación manifiesta o reto para que el público confronte sus propios recuerdos y se atreva a “acomodar todo el álbum de fotos de lo que hemos sido”.
En esta celebración de su encuentro con la novela corta, como un espacio literario que tiene el vértigo del cuento y la posibilidad narrativa de la novela, Mónica adelanta que tiene en mente iniciar alguna obra “muy chilanga», donde la Ciudad de México sea parte de una narración contemporánea y aunque no adelanta la trama de la historia, si apunta que sigue interesada en explorar los dilemas de las parejas, de las nuevas familias, del desamor, de la vejez y de la muerte.
“Me llama la atención como la idea de familia ha cambiado, la pareja, el divorcio, el matrimonio. Hoy los jóvenes tienen otra idea del mundo, donde ya la meca no es formar una familia”, apunta y compara su generación, en sus palabras “utópica” con las generaciones actuales, donde los horizontes son inciertos y tienen que fabricar contra viento y marea, con menos oportunidades y más imaginación, porque nada es seguro.
Observadora de la sociedad actual y cercana a la clase media, Mónica Lavín describe a este grupo como lleno de melodrama e intensidad, porque a diferencia de otros países, la clase media mexicana vive en riesgo permanente y por lo tanto se mantiene en pie de lucha, “es una clase que trabaja mucho y que siempre ha pensado que las cosas estarán mejor”, aunque afirma que le gustaría que la ciudadanía fuera consciente de su capacidad de inventiva y organización más allá de los medios institucionales.
“Yo creo en las organizaciones ciudadanas, las ONG’s, hay todo tipo de posibilidades de construir un mundo al margen de los partidos políticos. Somos un país de enormes riquezas humanas, somos un país que sigue sonriendo”, señala Mónica, tras reflexionar en los múltiples problemas que aquejan al mexicano, ya sea con la violencia que cierra las puertas a los jóvenes orillándolos a un camino en el tráfico de drogas o con las historias desgarradoras de los niños migrantes que cruzan el territorio en busca de un mejor futuro.
“Creo que hay mucha obligación de toda la esfera política y empresarial, y esto comienza por la educación y con una salida laboral que permita a las generaciones soñar en un mundo en el que podamos estar en paz” concluye la autora que participará en la feria literaria que se llevará a cabo del 22 al 31 de agosto en el polideportivo Carlos Ramírez Balmori, en la Ciudad del Conocimiento de Pachuca, Hidalgo.