Cimacnoticias | México, DF.- De no despenalizar el aborto, el Congreso de Guerrero perpetuaría el “Estado feminicida” que México representa para las mujeres, al negar la práctica del aborto voluntario, no garantizar el acceso a servicios de salud, y al criminalizar a las mexicanas que interrumpen su embarazo o tienen un aborto espontáneo.
Así lo hicieron saber académicos, activistas y feministas a las y los legisladores locales en un desplegado publicado ayer en la prensa estatal, luego de que este martes 10 de junio las comisiones unidas de Equidad de Género, Justicia y Salud aprobaron un dictamen que desecha la iniciativa de despenalización del aborto hasta las 12 semanas de gestación.
Más de 180 personas del ámbito académico y de la defensa de los Derechos Humanos (DH), entre ellas la doctora y académica de la UNAM, Araceli Mingo Caballero, y la ex diputada federal Adriana Luna Parra, pidieron al Congreso guerrerense “una actitud congruente con sus propios y declarados postulados políticos”, pues en ellos afirman estar y trabajar a favor de la igualdad, las libertades, los derechos y las garantías de la población.
En ese contexto, consideraron que “la acción persecutoria del Estado contra la práctica del aborto voluntario en varios estados en los últimos seis años ha convertido al Estado mismo en feminicida”.
Explicaron que México está obligado a prevenir e impedir la pérdida de la vida de las personas, pero incumple esta obligación cuando se trata de mujeres que recurren por su propia decisión y necesidad a los abortos inseguros, mal practicados, lo que “ha condicionado a miles a perder la vida y a poner en riesgo su salud”.
De acuerdo con cifras oficiales, el estado de Guerrero ocupa el primer lugar nacional en índice de muerte materna (MM). Para 2012, la razón de muerte materna (RMM) fue de 75.9 decesos por cada 100 mil nacidos vivos, mientras que la RMM a nivel nacional fue de 42.3 decesos por cada 100 mil nacidos vivos.
Las y los firmantes del desplegado –como la feminista Lucía Núñez Rebolledo y Daniela Díaz, investigadora del área de Presupuestos y Políticas Públicas de Fundar Centro de Análisis e Investigación–, expusieron que el feminicidio es una acción contra la vida de las mujeres, pero también y “especialmente cuando se trata de autoridades, es una omisión, es decir, el dejar de hacer algo para proteger la vida de tales mujeres”.
Por ello –afirmaron– la aprobación de la despenalización del aborto es fundamental para prevenir que tales muertes y complicaciones sigan ocurriendo y así hacer que México deje de ser un “Estado feminicida”.
Al hacer un llamado para que las y los legisladores conozcan la opinión de quienes reivindican los derechos de las mujeres, solicitaron también que la iniciativa sea votada “en laicidad” y escuchando los argumentos expuestos en los que se resalta que lo verdaderamente importante es la vida y salud de las mujeres.