Día Internacional de la Mujer Rural
Por Anaiz Zamora Márquez
México, DF. (Cimacnoticias).- Las políticas públicas del gobierno mexicano no contribuyen al empoderamiento, desarrollo económico y humano de las mujeres rurales, pues en están basadas únicamente en una visión asistencialista, que no las considera agentes de cambio, sujetos de derechos ni seres capaces de generar sus propios recursos, consideró la Fundación Mexicana para el Desarrollo Rural (FMDR).
En el Día Internacional de la Mujer Rural, la asociación criticó que los programas destinados a combatir la desigualdad y pobreza extrema no doten de herramientas propias a las comunidades rurales y sólo les otorguen ciertos recursos que no derivan en resultados a largo plazo para la población femenina que ahí vive. Esos programas, dijo, están rebasados.
Directivos de la FMDR presentaron los resultados de su programa «En Pro de la mujer» que promueve la generación de ingresos familiares impulsando actividades económicas realizadas por mujeres, así como la construcción de su autoestima e identidad.
El director de la FMDR, Alfredo Lozano, declaró que las zonas rurales de México viven un contexto de marginación y abandono por lo que las mujeres están expuestas a severas limitaciones tanto a nivel comunitario como individual que no están visibilizadas en estos programas.
Esa condición en que viven se ha incrementado debido al creciente fenómeno migratorio que ha dejado a muchas de ellas al frente de sus familias y sin ingresos económicos, pues generalmente eran sus parejas quienes aportaban los recursos.
En ese sentido, Lozano consideró que al tener una visión asistencialista, los programas gubernamentales no generan resultados positivos o soluciones a largo plazo pues no constituyen un ingreso propio y no abonan en la construcción de una identidad propia en las mujeres.
En ello coincidió el presidente del Consejo directivo, Alberto Castelazo, quien apuntó en la necesidad de que los programas que sí promueven el empoderamiento de las mujeres se conviertan en políticas públicas, porque son formas de colocar a las mujeres desde una visión distinta, lo que a la vez abona en la construcción de una nueva estructura social que rompa con el estereotipo de género que hace ver a las mujeres como seres pasivos y sólo dedicadas al cuidado del hogar.
Gabriela Martínez, directora del área de educación de la FMDR, explicó que, conscientes de que las mujeres rurales tienen a su cargo el resguardo de la seguridad familiar, la educación y la salud, tanto de ellas como de sus hijas e hijos, creó “En Pro de la Mujer”,
El programa actualmente opera en comunidades de Oaxaca, Campeche y Yucatán y promueve la actividad económica de las mujeres ayudándolas a construir e impulsar proyectos propios, ya que está basado en que sean las mismas mujeres las que identifiquen las problemáticas más apremiantes de su comunidad y sean ellas mismas las que planteen soluciones.
Lo anterior, explicó, porque se ha identificado que cuando se trazan soluciones desde una visión ajena a la comunidad estas no derivan en cambios sustanciales pues no se conoce ni el contexto real de la comunidad o los usos y costumbres que no pueden llegar y romperse de manera inmediata.
La FMDR es una asociación fundada en 1963 y que busca impulsar el desarrollo integral de productores y familias rurales de bajos recursos a fin de disminuir la pobreza en el campo.