La presencia de policías federales en el centro histórico causó gran sorpresa entre la población que transitaba por el centro de la ciudad. Los parroquianos que pasaban por la Avenida Hidalgo, de alguna manera se las ingeniaban para observar a los agentes federales, por lo que caminaban, hacían compras, incluso curioseaban entre los aparadores del centro de la ciudad.
Eran aproximadamente tres camionetas, con cerca de ocho uniformados por unidad, los que portaban armas cortas y largas, sin faltar el chaleco blindado con sus siglas AFI. Solo faltó el casco. Se veían relajados, incluso alguien comento a su paso, andan de âPoli tourâ.
A ciencia cierta nadie supo el quehacer de los oficiales federales en el centro histórico, lo que sí se senía, era la atmosfera un tanto extraña en el centro. Esto ocurrió cerca del medio día. Incluso se podían observar algunos grupos de policías a discreción por un lado y otros por otro rumbo. Eso sí, siempre alertas.