Con el tema âLa Identidad Profesional del Docente de Educación Preescolar. Un Constructo Discursivo e Imaginarioâ,  Adriana Lorena Donlucas Zaldívar, egresada de la Maestría en Docencia y Procesos Institucionales presentó su examen profesional  para obtener el grado, siendo aprobada por unanimidad, con mención honorífica.
Como sinodales participaron los maestros Domingo Cervantes Barragán, María Esther ívila Gamboa, Manuel Martínez Delgado y Marcelina Rodríguez Robles, quien fue la asesora de tesis. Por parte de la Escuela Normal âManuel ívila Camachoâ acudió la profesora Claudia Piña Robles.
El trabajo de tesis de Adriana Lorena Donlucas Zaldívar  parte del análisis de los procesos discursivos e imaginarios que han constituido de manera histórica la identidad del docente zacatecano de educación preescolar.
De acuerdo con la sustentante, es a partir de una historia de los olvidos donde se rescata las significaciones de la educación preescolar como nivel educativo, así como las que consintieron una identidad llena de estereotipos, mitos y creencias, donde el sujeto es âanunciado como educador (a), no como docenteâ. Â Son los imaginarios de la sociedad sobre esta profesión, dice la universitaria.
En su trabajo  analiza dónde estuvieron la rupturas y coyunturas que fueron constituyendo esta particularidad dentro del magisterio, para lo cual expone diversos planteamientos, entre ellos: ¿Cuáles son los procesos discursivos a través de los cuales el docente de educación preescolar zacatecano construye su identidad? ¿Cuáles son las rupturas, los olvidos y los momentos coyunturales que han hecho que los discursos se transformen en prácticas?
Señala que hay un constructo y supuestos hipotéticos para hacer un âejercicio de visibilizaciónâ y escribir sobre esos olvidos constitutivos en el margen de la coyuntura de la obligatoriedad, ya que antes -añadió- no había una legislación o una política que reconociera al docente de educación preescolar.
âEn el discurso te dicen que eres un profesional de la educación y te lo dan como una cuestión naturalizada, cuando había una negación históricaâ. A partir de aquí -comentó la tesista- ya no hay rupturas y hay un nuevo margen donde se mueve la posición. Entonces se tiene que construir el âsignificante profesionalâ.
Adriana Lorena Donlucas Zaldívar cuestiona en ese marco: ¿Cómo se piensa una educadora  a la que le celebran su día en marzo, cuando existe un día oficial para los maestros que es el 15 de mayo? ¿Cómo se ve el sujeto como egresado de una escuela de educadoras y no de una escuela normal?
âEse sujeto imaginado âexplica– cambia porque ya se le está diciendo que es el profesional y es la base del sistemaâ. Se parte de una identidad olvidada para, Â una vez que es reconocida la profesión de docente de educación preescolar, se encuentre el significado de lo que es âser profesionalâ.
Añade en ese contexto: Al someterse a evaluación,  el maestro de este nivel va a ser sujeto a cuestiones de estándares y a rendir cuentas por vez primera. Para ello âprimero tiene que reconocerse no en el qué es, sino el quién es, para construir su identidad profesional como docente de educación preescolarâ.