Poco antes de que iniciara la sesión ordinaria de la Comisión Permanente de la Sexagésima Legislatura del Estado que encabeza la Diputada Ana María Romo Fonseca, fueron recibidos en la sala de sesiones del quinto piso del congreso un grupo de maestros jubilados que pusieron a consideración de los legisladores una iniciativa de punto de acuerdo.
La iniciativa presentada por los mentores en retiro pretende se adicione un artículo 35 bis a la Ley de Servicio Civil del Estado de Zacatecas, cuyo objetivo especifico es la implementación de la figura jurídica que denominan âprima de antigí¼edadâ.
La prima solicitada consiste en el pago de doce días de salario por cada año de servicios a los trabajadores de los Poderes del Estado, dependencias del Poder Ejecutivo, municipios, entidades para municipales y las de la administración pública paraestatal que hayan, por alguna razón, terminado su relación laboral.
La misma, tendría vigencia en caso de separación voluntaria, rescisión con o sin causa, fallecimiento del trabajador, incapacidades permanentes y jubilación. Â Afirman que ese monto económico, de conseguirse, ayudaría a los trabajadores y a sus beneficiarios a sobrellevar las cargas que tal finalización de la relación laboral representa.
A nombre de la Sexagésima Legislatura, la Diputada Ana María Romo Fonseca, en su calidad de Presidenta de la Comisión Permanente, aseguró a los visitantes que se le dará la mayor atención a la revisión, análisis y dictaminación al documento a través de la Comisión Legislativa correspondiente.
AgregóÂ que los propios diputados están interesados en que prospere, ya que existen muchos integrantes de la legislatura que son maestros de profesión y también resultarían beneficiados en caso de que se aprobara.
Coincidió en que la mayoría de los derechos laborales conquistados por los trabajadores mexicanos en el pasado, han costado sangre y enormes sacrificios, por lo que está a favor de un trato más justo a quien entrega la mayor parte de su vida a la realización de un trabajo, y que, por desgracia, sigue careciendo de los emolumentos necesarios para la mejora de las condiciones de vida del trabajador y su familia.