En su primer discurso como virtual ganador de las elecciones presidenciales, Andrés Manuel López Obrador expresó que gobernará con rectitud y justicia, “no les fallaré”, hace un llamado a la reconciliación de los mexicanos. Aseguró que no habrá en México una dictadura ni abierta ni encubierta y afirmó que desterrará la corrupción del gobierno.

En su mensaje, mencionó que “hoy es un día histórico y será una noche memorable, una mayoría importante de ciudadanos ha decidido iniciar la cuarta transformación de la vida pública de México”.

Agradezco a todos los que votaron por él y por los demás candidatos de Morena “y nos han dado su confianza para encabezar este proceso de cambio verdadero”; expresó su respeto a quienes votaron por otros candidatos y partidos, así como “para los tres candidatos a la presidencia de la república y las distintas organizaciones que el día de hoy han reconocido nuestro triunfo, nuestra victoria”.

Llamó a todos los mexicanos a la reconciliación y a poner por encima de los intereses personales, por legítimos que sean, el interés superior, el interés general, “como afirmó en su momento Vicente guerrero, la patria es primero”.

Señaló que “el nuevo proyecto de nación buscará establecer una auténtica democracia; no apostamos a construir una dictadura abierta ni encubierta, los cambios serán profundos pero serán con apego al orden legal establecido”.

López Obrador aseguró que “habrá libertad empresarial, de expresión, de asociación y de creencias; se garantizarán todas las libertales individuales y sociales así como los derechos ciudadanos y políticos consagrados en nuestra constitución”.

Asimismo, dijo que se respetará la autonomía del Banco de México y que el nuevo gobierno mantedrá disciplina financiera y fiscal, además de que se reconocerán los compromisos contraidos con empresas y bancos nacionales y extranjeros, sin embargo, afirmó que los contratos del sector energético suscritos con particulares serán revisados para prevenir actos de corrupción o ilegalidad y en el caso de que se encuentren irregularidades, acudirá al congreso para resolverlas.

El virtual presidente reiteró que “siempre nos conduciremos por la vía legal, no actuaremos por la vía arbitraria ni habrá expropiación de bienes; la tranformación que llevaremos a cabo consistirá básicamente en desterrar la corrupción de nuestro país, no tendremos problema en lograr este propósito porque el pueblo de México es heredero de grandes civilizaciones, es bueno, responsable y trabajador.

“Estamos absolutamente seguros de que este mal es la causa principal de la desigualdad social y la desigualdad económica y también por la corrupción, se desató la violencia en nuestro país. Erradicar la corrupción y la impunidad, será la misión principal del nuevo gobierno”.

Manifestó que el nuevo presidente bajo ninguna circunstancia permitirá la corrupción ni la impudiad, “sea quien sea será castigado, incluyo a compañeros de lucha, a funcionarios, a los amigos y a los familiares. Un buen juez por la casa empieza”.

Informó que todo lo que se ahorre por el combate a la corrupción y por abatir los privilegios, se destinará al desarrollo del país, no habrá necesidad de aumentar impuestos ni de endeudar el país, tampoco habrá gasolinazos, disminuiré el gasto corriente y se privilegiarán actividades que sean productivas y generen empleos.

Dijo además que se fortalecerá el mercado interno, se tratará de producir en el país lo que consume y que el mexicano sea feliz en donde nació, donde está su familia y sus costumbres, que “quien desee emigrar lo haga por gusto y no por necesidad”.

Destacó que el Estado dejará de ser un comité al servicio de una minoría y representará a todos los mexicanos, a ricos y pobres, a pobladores del campo y la ciudad, a migrantes, a creyentes y no creyentes, a seres humanos de todas las corrientes de pesnamiento y de todas las preferencias sexuales.

“Escucharemos a todos, atenderemos a todos, respetaremos a todos, pero daremos preferencia a los más humildes y a los más olvidados, en especial a los pueblos indígenas de México. Reitero, una frase que sintetiza mi pensamiento: por el bien de todos, primero los pobres”.

Cambiará estrategia de seguridad

Andrés Manuel López Obrador aseguró que “cambiará la estrategia fallida de combate a la inseguridad y la violencia, más que el uso de la fuerza atenderemos las causas que los originan, la forma más eficaz y más humana de enfrentar esos males exige necesariamente del combate a la desigualdad y la pobreza. La paz y la tranquilidad son frutos de la justicia”.

Dijo que a partir de mañana convocará a representantes de derechos humanos, a líderes religiosos, a la ONU y a otros organismos internacionales a reunirnos las veces que sean necesarias para organizar las acciones del nuevo gobierno.

También señaló que todos los días, desde muy temporano, desde las seis de la mañana se reunirá con los miembros del gabinete de seguridad, que habrá mando único y que se combatirá la inseguridad con perseverancia y profesionalismo.

Expresó que “seremos amigos de todos los dirigentes del mundo” y dijo coincidir con los principios de no intervención y solución pacífica de las controversias, porque “nada por la fuerza, todo por la razón y el derecho”.

Con estados Unidos, dijo, se buscará una relación de amistad y cooperación para el desarrollo, fincada en el respeto mutuo y en la defensa de nuestros paisanos que viven honradamente en ese país.

Agradeció las muestras de solidaridad recibidas de representantes de los distintos países del mundo. “A todos nuestro sincero agradecimiento y respeto”.

Reconoció además “el comportamiento respetuoso del presidente Enrique Peña Nieto en este proceso electoral, muy diferente porque me consta, al trato que nos dieron los pasados titulares del Poder Ejecutivo”.

También dijo, “fue ejemplar la pluralidad y el profesionalismo de la prensa, la radio y la televisión”. Los medios de información no fueron como en otras ocasiones, parte de la transmisión para la guerra sucia, también expresó su gratitud “a las benditas redes sociales”.

Reiteró su compromiso de no traicionar la confianza que depositaron en él millones de mexicanos. “No voy a decepcionarles, no voy a traicionar al pueblo, mantentgo ideales y principios que es lo más importante en mi vida. Tengo una ambición legítima, quiero pasar a la historia como un buen presidente de México”.

“Deseo, anhelo con toda mi alma poner el alto la grandeza de nuestra patria. Construir una sociedad mejor y la dicha de todos los mexicanos”, dijo finalmente.