Fotos: Misael Camarillo / MIRADOR

Por: Rosa María Quiñónez / MIRADOR

Zacatecas, Zac.- Un total de 16 municipios de 58 en Zacatecas serán gobernados por mujeres en el periodo 2016-2018, lo que representa el 27 por ciento en la entidad, por lo que se supera con mucho la media nacional en presidencias municipales que es del 12 por ciento.

Asimismo, tendrá Zacatecas 42 síndicas municipales, 157 regidoras por el principio de Mayoría Relativa (49 por ciento) y 99 regidoras de representación proporcional de los 9 partidos políticos acreditados ante el Instituto Electoral del Estado de Zacatecas (IEEZ), cifra que podría aumentar luego de que se resuelvan las impugnaciones por la falta de inclusión de las planillas de las candidaturas independientes que obtuvieron más del 3 por ciento de la votación.

Así lo informaron Elia Olivia Castro Rosales, Consejera del IEEZ y María Alicia Villaneda González, directora de Paridad entre los Géneros de dicho órgano electoral, quienes refirieron que en el periodo de gobierno actual, solamente hay en la entidad una presidenta municipal.

Los municipios que serán gobernados por mujeres son: Apulco, Atolinga, El Plateado de Joaquín Amaro, Trinidad García de la Cadena, Huanusco, Jiménez del Téul, Luis Moya, Momax, Monte Escobedo, Moyahua de Estrada, Noria de Ángeles, Tepechitlán, Teúl de González Ortega, Trancoso, Villa González Ortega y la capital, Zacatecas.

La información anterior se oficializó luego de que el Consejo General aprobara el cómputo estatal de las elecciones de ayuntamientos y de regidores por el principio de representación proporcional, tras una jornada electoral sin precedentes en la entidad, en la que se logró el 61 por ciento de participación ciudadana.

La Consejera Elia Olivia Castro afirmó que estas cifras son producto de la lucha incansable de las mujeres por acceder a espacios de decisión y de representación popular.

Agregó que las mujeres han logrado muy buena actuación en Zacatecas y que desde el IEEZ, especialmente desde la Dirección de Paridad entre los Géneros, se trabaja arduamente para que cada día más mujeres participen en la vida política del estado.

En este sentido, hizo referencia al programa de capacitación a mujeres líderes políticas implementado por el IEEZ desde antes de que iniciara el proceso electoral, el cual fue reconocido por ONU Mujeres y la Unión Iberoamericana de Municipalistas.

Por su parte, María Alicia Villaneda señaló que los resultados que arroja el proceso electoral compromete más con la ciudadanía para estar más de cerca y apoyar aún más a las mujeres interesadas en acceder a los cargos públicos.

“Esto implica, dijo, y lo hemos reflexionado con las mujeres que ya hoy son presidentas municipales y diputadas electas, que están conscientes de que deben llegar a imponer cambios en la manera gobernar y legislar”.

Refirió que “la mayoría de las mujeres que accederán al poder fueron capacitadas en liderazgo político, lo que les permitirá llegar con una perspectiva distinta” y destacó que como compromiso institucional, seguirán apoyando a esas mujeres porque muchas de ellas no han tenido la experiencia de un cargo público, por lo que se les brindará acompañamiento y capacitación.

Villaneda González mencionó que “hoy las mujeres en Zacatecas que gobernarán desde los municipios, en las sindicaturas y regidurías, han reflexionado en lo que implica el poder, un poder distinto que tenga el sello de la inclusión, de la igualdad, de la justicia social”.

Por ello, aseguró, “estamos esperanzadas respecto de que en Zacatecas se tiene qué notar la manera de gobernar desde una perspectiva de género, una perspectiva incluyente, igualitaria, que incluya la visión de los demás, por lo que les daremos acompañamiento para que se pueda gobernar y legislar con perspectiva de género”.

Por otra parte, Elia Olivia Castro señaló que en este proceso electoral se lograron importantes avances en la participación de las mujeres, sin embargo, consideró que es necesario fortalecerla.

Es decir, que las mujeres “dejen de lado el temor a ser juzgadas y entrar en el mundo de la política, que merece tener mujeres con una actitud de mejorar las cosas, de llevar a cabo cambios que sean en beneficio de la ciudadanía, no de unos pocos, que no vean el cargo público como mejorar un estatus, sino desde el punto de vista de que mujeres exitosas puedan hacer cambios importantes en sus municipios”.

En este sentido, María Alicia Villaneda mencionó que “habría qué quitarse la idea de que la política o lo público es para los hombres en cuanto a que es competitivo y que es agresivamente egoísta, individualista, que está lleno de corruptelas, que asusta o intimida a las mujeres”.

“La idea –refirió-, es llegar a lo público para limpiarlo, para transformarlo, adueñarse de él y convertirlo en un espacio con reglas distintas; limpiarlo de la agresividad y competitividad feroz para las personas”.

Y afirmó que “una de las maneras de facilitar el acceso de las mujeres a lo público es que las mujeres que van llegando lo vayan reconvirtiendo, cambiando, transformando, haciendo claridad en los procesos por los cuales se llega al poder”, lo que es posible si quienes llegan al poder toman conciencia de que no se tienen qué pagar altos costos que no son para el beneficio común, que son de beneficio para un partido, pero no para la sociedad.

Esto, indicó finalmente, es posible siempre y cuando las mujeres que llegan a los espacios de decisión asuman plenamente lo que es tener conciencia social y política.

Si bien la mujer tiene presencia en la organización electoral y la legislativa a nivel municipal ocupando regidurías y sindicaturas, al mismo tiempo se ha tenido poca participación ya que se han registrado trienios completos sin alcaldesas.

Observemos que el incremento más importante, coloquialmente llamado “el error de Arturo Romo”, fue aquel donde se tuvo el mayor número de presidentas municipales de 1992 a 1995[1] (que es de donde partimos para esta muestra) las cuáles fueron:

En Cañitas de Felipe Pescador con María Encarnación Barrios Sifuentes; en Genaro Codina Herminia Hernández Castro; en Pánfilo Natera, Lidia Méndez Rangel y en Morelos, Margarita Fajardo Guerrero.

Para el trienio 1995 a 1997, la misoginia política pudo haber estado de plácemes: Ninguna mujer fue alcaldesa. Pero en el periodo de 1998-2001, la situación cambio un poco, fueron dos las presidentas municipales. En Guadalupe, Laura García Medina y en Zacatecas, María del Socorro Núñez Monreal, quien no terminó el trienio para cumplir el encargo de diputada federal.

En el periodo 2001-2004, en El Salvador gobernó Natalia Gámez Ochoa y para el siguiente periodo de gobierno, en García de la Cadena, Ruth Isela Mena Guzmán e Imelda Mauricio Esparza, en Villa González Ortega, ocuparon los cargos de alcaldesas en sus respectivas demarcaciones.

En total, nueve mujeres en tan sólo 12 años llegaron a ser presidentas municipales. No más. ¿Desigualdad?