Cimacnoticias | México, DF.- Las jóvenes en México se ven severamente limitadas por barreras culturales, la falta de servicios de salud de calidad, o las normas restrictivas para decidir sobre sus cuerpos y el momento en el que desean ser madres.

Ese fue el tema central de una de las sesiones de webinar que la Coalición por la Salud de las Mujeres realizó como parte del Día por la Despenalización del Aborto en América Latina –que se conmemora el próximo 28 de septiembre–, y en el que expertas en salud sexual abordarán, desde distintos enfoques, las barreras que enfrentan las mexicanas para ejercer su derecho a decidir.

En la primera transmisión, Cecilia Espinosa, asesora en Juventudes de Ipas-Latinoamérica, señaló que las jóvenes son las que siguen llevando la carga más pesada del aborto inseguro en la región, ya que 33 por ciento de esta práctica en mujeres jóvenes se da en condiciones inseguras.

Esto se da en un contexto en el que las adolescentes son quienes enfrentan las mayores barreras para acceder a servicios de salud de calidad y calidez, así como a métodos anticonceptivos y educación sexual integral.

Espinosa puso como ejemplo el hecho de que 48 por ciento de las jóvenes no desean tener un hijo, pero tienen una demanda insatisfecha de anticonceptivos, al mismo tiempo que la mitad de esta población ha tenido relaciones sexuales antes de los 20 años.

En ese sentido apuntó que además de estas barreras, las jóvenes deben enfrentar leyes sumamente restrictivas y que van más allá de la prohibición del aborto, toda vez que aunque esté permitido, existen normas que piden la intervención de padres y tutores tanto para consentir la interrupción del embarazo, como para proveer otro tipo de servicios.

Para la especialista es primordial que se despenalice y considere el aborto como un derecho al que las jóvenes deben acceder, pues garantiza que puedan decidir libremente el momento en el que desean ser madres, y asegura que muchas de ellas no arriesgarán su vida o su salud recurriendo a prácticas inseguras.

Cecilia Espinosa indicó que no se debe ver al aborto como un hecho aislado, por lo que deben plantearse respuestas más integrales para evitar interrupciones del embarazo en condiciones de inseguridad.

Es indispensable –abundó– que se emprendan políticas de educación sexual integral, se garantice a las jóvenes el acceso a anticonceptivos y a servicios de emergencia obstétrica (en el caso de abortos inseguros).

Al señalar que entre 25 y 40 por ciento de las mujeres inició su vida sexual antes de los 18 años de edad –lo que las coloca en una posición muy difícil para negociar el uso de métodos de control natal o prevenir embarazos no deseados–, la especialista consideró que también se debe pensar en prohibir los matrimonios antes de los 18 años.