El Tintero (Re-Cargado).

Eduardo Valencia Barrera.*

Bueno, bueno, no puede uno dejarlos solos porque hacen puro relajo. A la entidad ya la comienzan a dibujar de cabeza en los mapas. ¡Qué caray! Ya van varios meses del “nuevo” gobierno y, la verdad, “las malas” han ganado; han imperado.

Hasta creí­ que al festinar sus 100 dí­as 100 (in)acciones, serí­a: 100 dí­as, 100 notas periodí­sticas de desaparecidos, balaceras, secuestros, robos, levantones, heridos, motines, en fin, todo el avance de la delincuencia.

Y que en lugar de leer o presentar, virtualmente, el Plan Estatal de Desarrollo, mejor se pondrí­an a leer el periódico La Prensa o el Alarma o el Alerta, ¡Qué mal plan!

Fí­jense que, en estos últimos meses, he andado por los municipios de Zacatecas, ya tení­a rato de no hacerlo y oh my good, el abandono es imperante; el estado está caí­do, en la indefensión y sin que se sienta la mano gubernamental. ¿Nos gobernará el Tunco Maclovio o el de Lepanto o el de Celaya? (El último en mención, ojalá).

Resultó que los zacatecanos, en tan sólo seis años, quedamos huérfanos de madre y, ahora, de padre, ¡chale! ¡Qué padre! Es realmente lastimoso ver a nuestros pueblos cada vez más desolados, atrasados y gente, mucha gente, sin futuro alguno.

Un pueblo que ya ni siquiera recibe migajas de beneficio. Porque, claro, quienes nos (des)gobiernan (pensé que ya no usarí­a esa palabreja) prefieren dejarse ver, pero para ser candidatos. El estado les vale madre, es la neta.

Por el momento, no se ve que en el (des)gobierno (pensé que ya no usarí­a esa palabreja) estén armando equipo, para que ello le diera fortaleza; por el contrario, dan la impresión que cada cual ve para su santo… o santa.

No hay atención para con la gente. Sólo hay una gran decepción social. Hay desencanto porque el cambio, el movimiento, no se ve por ningún lado. O, igual, se ve por ningún lado porque, aparte, por si fuera poco, la gente está atrapada en la inseguridad.

No se ve un gobernante echado pa´ lante. La verdad, Miguelito no está conduciendo a la sociedad ni ha evitado la improvisación y el oportunismo. (Desde mi particular punto de vista aún no le alcanza para decirle Miguel y, mucho menos, gobernador).

Nadie, absolutamente nadie debe perder el tiempo, pero se palpa que no hay visión de largo plazo ni proyecto económico. Todo lo que están haciendo es tan improvisado como su “guerra” contra la delincuencia.

Estamos frente a un gobierno torpe, inepto, distraí­do y con múltiples jefes. Es claro que la gente ya lo notó, si no somos estúpidos. Ante ello, no serí­a raro ni extraño que el PRI no hallé la cuadratura al cí­rculo en el próximo proceso electoral porque de dónde van a sacar Migueles Alonsos para los distritos federales y para el Senado. ¿Pos dionde?

Porque para nadie es extraño que, en Zacatecas, perdió Amalia y ganó Miguel Alonso, nunca el PRI como tal. Siempre lo dije: Miguelito es rentable electoralmente, pero, ¿va a ir a todas?

Sí­, la maquinaria del PRI sigue oxidada desde 1998, pero compraron la carta de un candidato con jalón electoral y, bueno, ya todos sabemos que gracias a las gracias de las Garcí­as el PRD sucumbió.

En fin, dejemos el background y veamos el presente y visualicemos el futuro, muy incierto, por cierto. Porque el pasado, ya quedó y ni llorar es bueno.

Nadie podrá negar que, en su momento, sí­, en su momento, desde esta misma plataforma se dio cuenta de todas las tropelí­as que realizó Amalia Dolores, así­ es que, para qué insistir; esperemos que las instancias correspondientes se encarguen de ella y que la historia la juzgue y deje bien guardado su sexenio en lo más profundo de algún bote… ¡de basura!

De ahí­ que lo importante es ver lo que tenemos y tenemos qué hacer. Además, los corifeos (unos más que otros) ya se encargaron de defenderla en su momento, como ahora lo hacen con Miguelito, ya saben, el que paga manda.

Lo cierto y lamentable es que a Zacatecas la abraza el desempleo, la pobreza, las desigualdades sociales. Es un estado donde la mayorí­a cuenta con centavos para la comida del dí­a, cuyo precio está en pesos.

Solidarizarse con los pobres no es cargarles la mano ni que la extiendan para recibir migajas. Y como si eso fuera poco, cada dí­a estamos más inseguros en la calle y en nuestra casa.

Considero que Miguelito aún puede hacer algo, es más, debe hacer algo porque el desgano, el desencanto ha crecido más que su mal empleada publicidad en movimiento.

En movimiento estamos todos porque cada que hay balazos, que casi es a diario, pues a correr se ha dicho. No hay de otra, ante un gobierno fallido, es urgente un cambio de rumbo.

Empero, ¿quién lo hará? Realmente todos los que han copado y chantajeado a Miguelito le van a ayudar o sólo le están ayudando a bien morir. Es pregunta.

Miren: Conozco muy bien a Miguelito, fuimos vecinos de oficina varios años, no es mal chavo, lo malo es que siempre ha necesitado que lo lleven en brazos.

Espero que ya comience a dar sus pasitos, sí­, como bebé; que haga un solito y ya avance, que camine, pues. Y hasta puede cantar esa de “paso a pasito, llegaré”.

No dudo que tenga con qué, aunque, bien a bien, no sé si tenga con quién. í‰l vio y vivió la debacle del sexenio anterior, así­ es que cuando veas las faldas de tu antecesora cambiar por unas color caqui, pon tu gel a remojar.

Lo que no acaban de entender los señoritingos del “poder”, es que nuestra gente ya no está dispuesta a soportar más mentiras ni a ser ninguneada por el abuso y desdén gubernamental.

No se trata de ir a los municipios sólo por la foto, -en la que deben salir sonrientes y hasta cargando a un niño- eso es del pasado, de aquel PRI que sumió a Zacatecas en el atraso por más de 70 años. Hay que tener memoria, carajo.

Ahora Miguelito sale con que evaluará cada mes a su gabinete, (con minúsculas) sólo eso nos faltaba, cuando un inútil se nota de inmediato. Un dí­a basta para darle calle a quien no funciona y retrasa la atención a la población.

¿Entonces, de evaluación en evaluación tendrí­amos que soportar alrededor de 30 dí­as a un inoperante? ¿Qué parte de NO HAY TIEMPO QUí‰ PERDER no le ha quedado claro a Miguelito?

Es un hecho: ni en el PRI ni en el gobierno está la intención de movimiento y de transformación social. No están ahí­.

*Comunicólogo.