Zacatecas, Zac.- La presencia de panales de abejas en diversos lugares de Zacatecas y Guadalupe ha generado temor entre ciudadanos que expusieron su denuncia a nuestro medio de comunicación y pidieron la actuación inmediata de las autoridades correspondientes, antes de que ocurra alguna situación qué lamentar.
En el primero de los casos, familias de la calle Enrique B. Hinojosa de la colonia CTM de la capital, señalaron que se encuentran en constante peligro por una especie de granja apícola que un vecino que calificaron como rudo y violento, tiene, identificado como José Campos.
Los afectados hacen un llamado a las autoridades municipales o a quien corresponda para que actúe a la brevedad, ya que amas de casa no pueden realizar sus actividades cotidianas ni los menores pueden convivir tranquilamente por temor a un ataque de las abejas. Los denunciantes solicitaron el anonimato por temor a represalias de su vecino.
Abundaron que este problema lo tienen desde hace 15 años y que han puesto una denuncia formal ni acudido a ninguna instancia debido a que su vecino José Campos es una persona agresiva, incluso agregaron que el de las abejas no es el único problema que han tenido con él, lo mismo sucede cuando invita a sus amigos a su casa a tomar bebidas embriagantes, pone la música a alto volumen y termina sus reuniones hasta altas horas de la madrugada.
El perjuicio por el actuar de este vecino, también lo es para los menores que no pueden hacer uso de la cancha que se ubica en la zona habitacional, ya que por temor a un ataque de abejas los niños no salen a jugar.
Por si no fuera suficiente, además de alterar el orden público, tanto con música a niveles altos, sus cajones de abejas, el señor también tiene criadero de gallinas el cual tiene en condiciones insalubres.
Por ello, y ante el hartazgo del actuar de este vecino, aunado al peligro que éste representa, los colonos de la CTM hacen un llamado tanto a la dirección de seguridad pública y demás autoridades municipales competentes, para que cuanto antes, vayan a retirar las abejas y pongan orden en la zona por el bien de las familias que ahí habitan.
Otro caso en Guadalupe
También en Guadalupe se presentó otro caso similiar. Tras el continuo y peligroso ataque de abejas, familia afectada de la comunidad de San Jerónimo solicitó la urgente actuación de las autoridades correspondientes en contra del propietario de un predio con abejas, pues temen por su vida.
El señor J. Cruz Sifuentes Sánchez, afectado y habitante de la comunidad citada, denunció que su familia vive en total angustia por unos cajones con abejas que están en la comunidad de Bañuelos, mismo que pertenecía al exfuncionario municipal Roberto Escalera Fonseca, que supuestamente en fecha reciente, vendió y se desconoce el nombre del nuevo propietario.
El afectado relató que hace cuatro años acudió a la presidencia para hacer del conocimiento el perjuicio que vive cada vez que él y su personal auxiliar, se disponen a realizar sus tareas en el campo, por el recurrente ataque de las abejas que se encuentran en ese predio, una situación que no ha logrado evitar porque hasta hoy ninguna autoridad ha logrado actuar a su favor.
En ese sentido agregó que el pasado miércoles nuevamente tanto él como su esposa fueron atacados por los insectos, por lo que se vieron en la necesidad de acudir al médico quien les recetó un medicamento con un costo de 300 pesos, suma que para ellos es muy alta pero que además es un gasto que no tendrían por qué realizarlo si las autoridades hicieran lo que les compete.
Detalló que Roberto Escalera Fonseca para evitar ante los reclamos por los perjuicios recurrentes que sus insectos han ocasionado a su familia y trabajadores, un buen día les dijo que ya vendió esa propiedad, pero que desconocía quien supuestamente era el nuevo dueño.
Ante esta situación el afectado acudió ante secretario de la mesa directiva del comisariado ejidal de su comunidad, quien le prometió solucionar este problema, contrario a lo esperado, terminó su administración y nada arreglo.
Sin embargo como el peligro y el perjuicio continuó, decidió acudir a Protección Civil, pero tampoco lograron terminar con el problema, pues le argumentaron que no podían hacer nada porque es propiedad privada.
Por lo anterior y ante la impotencia de lograr que alguna autoridad tome cartas en el asunto, acudió a este medio de comunicación para nuevamente solicitar a las autoridades, intervengan urgentemente ya que teme por su vida, pues de continuar con esta situación no descartan una desgracia mayor.
